#6- "No Matarás", Éxodo 20:13
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Introducción:
Introducción:
No matarás.
Lo corto de este mandamiento, debe ser suficiente. Rodeados de una cultura pagana que glorificaba la muerte y despreciaba la vida, debía ser suficiente para los Israelitas, pero la humanidad siempre ha buscado formas de hacer lo quería y justificarlo para sus gustos.
Al considerar lo que es considerado el lex talionis, “ojo por ojo, diente por diente”, Éx. 21:23-25, muchos lo reclaman porque lo ven como promocionando la violencia. Al contrario, era para limitar la violencia vengativa de la cultura que llevaba a conflictos tribales de por años.
Mas si hubiere muerte, entonces pagarás vida por vida, ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura, herida por herida, golpe por golpe.
Como todo mandamiento en esta ley dada por Dios, no solamente se trata de seguirlo al pie de la letra, sino de entender el principio detrás de la letra, entendiendo lo que nos revela acerca de Dios.
Cada persona puede valorar la vida como Dios lo hace al entender algunos aspectos de este mandamiento.
El Mandamiento Definido
El Mandamiento Definido
Lo que no significa.
No es una prohibición contra cualquier tipo de matanza. Entonces, no debe ser entendido como “nunca se quita una vida, no importa la circunstancia”. No es apropiado citar este mandamiento como argumento contra el pacifismo o una justa pena de muerte.
La palabra hebrea traducida matarás en el sexto mandamiento, no es la palabra común que se usa la mayoría de la veces detrás de la palabra matar en el AT.
Este término nunca es usado en conexión con la ejecución de la pena de muerte, guerra justa, o al ser llevado a cabo por Dios o un ángel.
La guerra justa que defiende la paz y al inocente, a diferencia de aquellas que son por motivación egoísta (Sant. 4:1), puede también ser necesaria, y no violaría el #6.
¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros?
El estado llevando a cabo la justicia apropiadamente funciona como agente de Dios de la justicia, por ende, una pena capital puede ser apropiado en ciertos casos, Rom. 13:3-4. Argentina, después de largo tironeo de un lado a otro, finalmente abolió su pena de muerte en 1984, y el Código de Justicia Militar en 2008. Es necesario aclarar que esta abolición no fue por la validez de la pena de muerte en sí, sino por los terribles abusos y corrupción del mismo Estado en llevarlo a cabo.
Porque los magistrados no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres, pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella; porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo.
“La pena de muerte [justamente ejecutado] no es un asalto contra la imagen de Dios, pero una defensa de Su imagen. La vida humana es tan preciosa que el quitarlo [sin causa justa] debía ser castigado severamente”. — Kevin DeYoung, Los 10 Mandamientos.
Lo que significa.
El término ratsach es mejor traducido “asesinar”, es la acción de quitar una vida inocente, o o matar sin causa justa.
El AT tenía provisiones por causar una muerte sin intención, incluso ciudades de refugio (Núm. 35), y hace diferencia entre matar con intención (asesinato) y matar sin intención (accidental).
Entonces, el #6 apuntaba específicamente al homicidio intencional.
Ilustración: El sistema legal argentino hace diferencia entre formas de matar:
Homicidio culposo (sin intención), en riña.
Homicidio en legítima defensa.
Homicidio doloso (con intención), puede ser agravado (vínculo de personas), o eventual (circunstancias criminales causaron muerte).
Aplicación:
El Mandamiento Practicado
El Mandamiento Practicado
Prohíbe el asesinato.
Plenamente obvio que el mandato prohibe el homicidio intencional premeditado. También prohibió el asesinato intencional pero no premeditado, y el homicidio por negligencia (negligente- Deut. 22:8; Éx. 21:28-29).
Cuando edifiques casa nueva, harás pretil a tu terrado, para que no eches culpa de sangre sobre tu casa, si de él cayere alguno.
Si un buey acorneare a hombre o a mujer, y a causa de ello muriere, el buey será apedreado, y no será comida su carne; mas el dueño del buey será absuelto. Pero si el buey fuere acorneador desde tiempo atrás, y a su dueño se le hubiere notificado, y no lo hubiere guardado, y matare a hombre o mujer, el buey será apedreado, y también morirá su dueño.
Por la creación del hombre siendo a la imagen de Dios, el quitar una vida inocente es representativo de matar a Dios, Gén. 1:26-27, 9:6.
Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.
El que derramare sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada; porque a imagen de Dios es hecho el hombre.
Sin importar su género, etnicidad, edad, salud, economía, personalidad, y cualquier otro aspecto de la vida humana, cada persona es creada por Dios y tiene valor y dignidad como Su creación y portador de Su imagen.
Prohíbe el suicidio.
Al resaltar este valor y dignidad de toda vida humana, reflejando la imagen de Dios, incluye también la vida propia de uno.
Por doloroso y desesperanzado que puede ser la vida, el suicidio nunca es la respuesta correcta a los problemas de la vida.
Para aclarar, el suicidio no es lo que muchos en el pasado han señalado como el pecado imperdonable, aunque es un pecado irreparable a la vida de uno (uno mismo no se da el tiempo de corregir lo malo al quitarse la vida propia).
Si esa persona de veras fue un hijo/a de Dios por poner su fe en Cristo, aún ese pecado está cubierto por la sangre de Cristo, y su salvación y vida eterna está segura en Él, no lo perderá.
Sabiendo que quizás haya alguno escuchando esto que ha perdido a un ser querido porque terminó con su propia vida, debemos acompañar en lamento y consuelo por su pérdida, pero al mismo tiempo debemos reconocer lo pecaminoso que es tomar una vida de esa forma, incluso la vida propia.
El suicidio no es un rasgo genético ni es una maldición familiar. El suicidio es una elección pecaminosa realizada por un individuo. Esta afirmación no es intolerante ni irrespetuosa. Es la verdad. [Nuestras palabras deben ser] amorosas, para que otras personas en un lugar oscuro que puedan estar considerando tomar sus vidas, si no hay otras restricciones, quizás sean restringidas por la ley de Dios. El suicidio puede sentirse como la única salida, pero las Escrituras nos dicen que Dios nunca nos llevará a una situación en la que violar sus mandamientos es la única opción. No ayudamos a santos quienes están luchando al rehusar decirles que el suicidio es desagradable a Dios. Hablando con amor, en el momento adecuado, puede ser una forma en que Dios sacude el alma suicida a mejorar, en general, un pensamiento más correcto. Tu vida es preciosa para Dios, incluso cuando has llegado a la conclusión de que ya no tiene sentido. — citando a Julie Gossack en JBC, Kevin Deyoung, Los 10 Mandamientos (Wheaton, IL: Crossway, 2018), 99.
Prohíbe la eutanasia.
Esto es, activamente asistiendo al suicidio de un individuo mayor.
La Eutanasia es el acto de terminar con la vida de un paciente que se encuentre en estado de enfermedad terminal o irreversible, mediante métodos indoloros utilizando fármacos… Temas Controversiales, IBCIC.
La decision de terminar con la vida de uno mismo es diferente a la decisión de terminar con tratamiento que sólo extendería lo inevitable por unos meses más.
Uno de los peligros es que la decisión voluntaria de terminar con la vida puede llegar a ser involuntario, dejando al paciente sujeto a las decisiones de quienes son responsables en pagar por su cuidado médico, sea la obra social o el estado.
El origen de los horrores de la matanza de los judíos que ocurrió en Alemania bajo la dictadura de Hitler en los 1940 no fue el Nazismo ni el antisemitismo. Fue la aceptación de la eutanasia como humana y estimable que comenzó con un libro publicado en 1920 en Alemania, que propuso la idea de deshacerse de los "seres humanos absolutamente inútiles". El libro (Principios de la Heredad Humana y La Higiana Racial) enfatizó que la sociedad podría ahorrar muchos recursos si los seres humanos "inútiles" fueron descartados. El libro influyó el pensar de aquella generación médica en Alemania, y abrió la puerta a lo que sucedió antes y durante la Segunda Guerra Mundial.
Prohíbe el aborto.
Esto es uno de los temas más controversiales de nuestra época, y no debe ser mezclado con la política común o la moda del día.
No es nuestro propósito dar una defensa apologética completa del valor de la vida, porque es un tema digno de mas tiempo y profunidad del cual no disponemos hoy, sin embargo, es necesario fundamentar el valor de la vida aún más indefensa, la del bebé en útero.
La enseñanza bíblica enseña este hecho:
Para Dios, los hijos son bendición
Sal. 127:3 “Herencia de Jehová” y “Cosa de estima”
He aquí, herencia de Jehová son los hijos; Cosa de estima el fruto del vientre.
Prov. 17:6 “Corona de la vejez”
Corona de los viejos son los nietos, Y la honra de los hijos, sus padres.
Nos conoce antes de que fuésemos formados,
Sal. 139:13-16 “No fue encubierto de ti mi cuerpo, bien que en oculto fui formado”
Porque tú formaste mis entrañas; Tú me hiciste en el vientre de mi madre. Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; Estoy maravillado, Y mi alma lo sabe muy bien. No fue encubierto de ti mi cuerpo, Bien que en oculto fui formado, Y entretejido en lo más profundo de la tierra. Mi embrión vieron tus ojos, Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas Que fueron luego formadas, Sin faltar una de ellas.
Sal. 22:9-10 “Desde el vientre de mi madre, tú eres mi Dios”
Pero tú eres el que me sacó del vientre; El que me hizo estar confiado desde que estaba a los pechos de mi madre. Sobre ti fui echado desde antes de nacer; Desde el vientre de mi madre, tú eres mi Dios.
Gál. 1:15 “Me apartó desde el vientre de mi madre”
Pero cuando agradó a Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre, y me llamó por su gracia,
La Biblia los llama niños, aún cuando están en el vientre.
Gén. 25:21-22 Los llama “hijos”
Y oró Isaac a Jehová por su mujer, que era estéril; y lo aceptó Jehová, y concibió Rebeca su mujer.Y los hijos luchaban dentro de ella; y dijo: Si es así, ¿para qué vivo yo? Y fue a consultar a Jehová;
Luc. 1:41 Los llama “Criatura”
Y aconteció que cuando oyó Elisabet la salutación de María, la criatura saltó en su vientre; y Elisabet fue llena del Espíritu Santo,
Luc. 18:15, Los llama “Niños” (la palabra en griego para los dos textos es "brefos" y su significado es "Niño")
Traían a él los niños para que los tocase; lo cual viendo los discípulos, les reprendieron.
Dios prefiere la vida. Nosotros no tenemos decisión sobre ella, Is. 66:9.
Yo que hago dar a luz, ¿no haré nacer? dijo Jehová. Yo que hago engendrar, ¿impediré el nacimiento? dice tu Dios.
La vida comienza con la concepción, y las evidencias científicas respaldan este hecho.
Primera semana, el embrión ya cuenta con más de 200 células que forman su cuerpo.
Segunda semana, las células van formando todos los órganos internos.
Tercera semana, aparecen sus extremidades (manos, pies…)
Cuarta semana, sus ojos comienzan a distinguirse.
Quinta semana, su corazón late muy rápido y se desarrollan los pulmones
Sexta semana, Su cabeza es enorme en comparación al cuerpo y de van desarrollando los rasgos faciales,
Séptima semana, el esqueleto adquiere forma y el bebe se nutre normalmente por el cordón umbilical.
Octava semana, las extremidades ya están bien definidas (codos, rodillas) y hasta las orejas y párpados se notan con claridad, solo falta que siga creciendo y especializando el funcionamiento de cada órgano de su cuerpo.
"Para el feto, aunque en el vientre de su madre, ya es un ser humano, y es un monstruoso crimen robarle la vida que todavía no ha empezado a disfrutar. Si parece más horrible matar a un hombre en su propia casa que en un campo, porque la casa de un hombre es su lugar de más refugio seguro, debería seguramente ser considerado más atroz destruir un feto en el útero antes de que haya llegado a luz." - Juan Calvino
No infringe sobre lel derecho de la mujer más que otras leyes:
"No se puede legislar o decretar la moralidad." -- ¡Qué pensamiento erróneo!
Las leyes que forman el fundamento de cualquier sociedad son derivadas de los Diez Mandamientos, y efectivamente legislan la moralidad.
"No matarás"
"No cometerás adulterio"
"No hurtarás"
"No hablarás contra tu prójimo falso testimonio"
Las leyes de la sociedad, por lo tanto, legislan, en cierto sentido, la moralidad de los miembros de la sociedad.
Si la sociedad no sigue la moralidad, la anarquía y el caos resultan.
Decir que la sociedad no puede decir a una mujer lo que no debe hacer con su cuerpo es | una lógica errónea -- Las leyes dicen, por ejemplo,
que uno no debe drogarse,
que los menores no deben tomar bebidas alcohólicas,
que un conductor no debe manejar su auto a 160 kms en la ruta.
Todas estas cosas son posibles, pero no tenemos la "libertad" de hacerlas.
Libertad no significa licencia, o sea, "Yo puedo hacer todo lo que yo quiero".
Esto es irresponsabilidad, no la libertad.
"Cuando dicen que el aborto es solamente un asunto entre una mujer y su doctor, están olvidando a alguien," -- al bebé no nacido. La historia, aún en nuestro siglo, muestra que cuando una sociedad comienza a enfatizar el valor de una vida sobre la calidad de la vida, los horrores que pueden seguir son muchos.
"El aborto significa que no hay juez, ni jurado, ni juicio, ni apelación… de la ejecución".— Temas Controversiales, IBCIC.
El aborto tampoco es el pecado imperdonable. Para cada uno de los diez mandamientos quebrantados, hay perdón a través del Salvador Jesucristo.
Ilustración:
Cada vida humana es preciosa. La vida no nacida es preciosa. Los niños con necesidades especiales son preciosos. Los padres envejecidos son preciosos, incluso cuando no recuerdan porque están sufriendo demencia, todavía están hechos a la imagen de Dios. Los niños o padres no verbales, los que están en una silla de ruedas, y los que dependen completamente de otros o médicos, son preciosos. Toda la vida importa a Dios. Si tenemos nuestros ojos abiertos, podemos ver esto en incluso los lugares más sorprendentes de la Biblia, como en la Lex Talionis de la Ley de Mosaico. Lo ves en imago dei. Lo ves en la Encarnación, cuando Dios entró en el mundo como un bebé indefenso.
Defiende, honra y agradece por la vida, la tuya, la de tus hijos, y la de tus padres. El sexto mandamiento significa protegerla.
Kevin Deyoung, Los 10 Mandamientos.
Aplicación:
El Mandamiento Transformado
El Mandamiento Transformado
Puede ser que uno diga “No he hecho nada de esas cosas previamente mencionadas, he cumplido fielmente el #6”.
Jesús resaltó el problema real detrás del #6 en Mat. 5:21-26, la violencia del corazón. Uno puede ser completamente inocente de quebrantar la letra del #6, sin embargo, aún ser juzgado por Dios por una vida marcada por enojo, rencor, amargura, injuria, e ira.
Oísteis que fue dicho a los antiguos: No matarás; y cualquiera que matare será culpable de juicio. Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio, a su hermano, será culpable ante el concilio; y cualquiera que le diga: Fatuo, quedará expuesto al infierno de fuego. Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda. Ponte de acuerdo con tu adversario pronto, entre tanto que estás con él en el camino, no sea que el adversario te entregue al juez, y el juez al alguacil, y seas echado en la cárcel. De cierto te digo que no saldrás de allí, hasta que pagues el último cuadrante.
Cristo da dos ilustraciones aquí, una acerca de ir hacia el templo y la otra hacia el tribunal. Ninguna de las dos habla del enojo en la superficie, pero ambas tratan con la necesidad pronta de buscar la reconciliación.
Jesús enseña que es tan serio el tema del enojo de nuestro corazón que debemos hacer todo lo posible de eliminarlo de nuestro propio corazón, e incluso hacer lo posible de prevenirlo y aliviarlo en el corazón de otros.
La consecuencia de seguir con un corazón enojado es estar condenado a una prisión de nuestras propias emociones, lo cual lleva a consecuencias de toda relación de la vida, 1 Jn. 3:15.
Todo aquel que aborrece a su hermano es homicida; y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permanente en él.
La solución: A través del gran amor, perdón, y gracia de Cristo, podemos aflojar el agarre del rencor de nustras vidas, y aplicar la misericordia, la gracia, y el perdón hacia otros, Ef. 4:31-32.
Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.
Ilustración:
Aplicación:
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